Cada cara es única y casi nunca es perfectamente simétrica.
La cara casi nunca se ve perfectamente simétrica. De hecho una ligera asimetría además de ser bastante normal, contribuye a la expresión y le da carácter a la misma. El problema estético que acompleja a muchas personas aparece, cuando la asimetría es muy pronunciada. Para esos casos, los procedimientos especializados en intervenir el óvalo facial son la mejor opción a la hora de buscar armonizar y forma. Las opciones son varias y dependen del grado de asimetría existente.
Si la asimetría es muy pronunciada puede afectar al autoestima
La definición de simetría surge de la medición de las distancias entre la frente, la nariz, los labios y el mentón. Nadie es perfectamente simétrico en el mundo real, ya que son las diferencias las que nos distinguen de otros individuos. Los efectos psicológicos y complejos pueden aparecer cuando la asimetría es muy pronunciada, llegando a afectar incluso en el autoestima de las personas que la presentan.
La asimetría facial puede afectar el rostro en zonas específicas o de manera total. Se puede dividir a la cara en dos zonas de afección: el tercio medio (que incluye la nariz y los ojos) y el tercio inferior (que incluye la mandíbula, la boca y la barbilla).
La asimetría facial tiene varias causas, entre ellas patológicas
La asimetría facial puede ser producto de las siguientes causas:
- Causas congénitas
Tanto los músculos como el esqueleto pueden ser afectados. Un ejemplo ocurre en la microsomía hemifacial y el síndrome de Romberg en donde hay un desarrollo alterado de la mandíbula.
- Causas patológicas
La asimetría en el rostro puede ser causado por problemas musculares y óseos. Un ejemplo es la mordida cruzada en los niños, una de las malformaciones dentales más comunes en la infancia, de modo que los dientes anteriores y posteriores de los maxilares superior e inferior no se unen correctamente.
- Causas traumáticas
Los sucesos traumáticos también pueden ser responsables de la asimetría facial y, si se producen a una edad temprana, pueden provocar un crecimiento asimétrico del maxilar inferior o de otros rasgos faciales.
Depende de las causas de la asimetría existen tratamientos mas o menos invasivos
Existen varias opciones de tratamientos para la asimetría facial y dependen de las que causas que la determinan. Para los casos en que la asimetría es por causas musculares, se pueden utilizar, por ejemplo tratamientos estéticos no invasivos que tienen la ventaja de ser menos agresivos, no dejar grandes cicatrices y no necesitan de tiempo de recuperación.
- Rellenos
Los rellenos faciales son un tratamiento de lo mas eficaz para las asimetrías faciales de la parte inferior de la cara como el mentón, los labios y la nariz. Son altamente recomendables para tratar el llamado mentón retraído, pómulos débiles y otras imperfecciones que alteran el equilibrio del rostro. Es un tratamiento no invasivo en el que se inyectan rellenos compatibles con el cuerpo con el objetivo de aumentar el volumen de la zona afectada. El procedimiento es extremadamente eficaz y los resultados son visibles de inmediato. El efecto, por otra parte, es temporal y normalmente es necesario repetir el tratamiento al cabo de unos meses.
- Lipofilling
El lipofilling es un procedimiento un poco mas invasivo que los rellenos faciales. En este caso, se utiliza la grasa del propio cuerpo para obtener el material de relleno que le dará volumen a las zonas del rostro que, por falta de tejido graso, son las que provocan la asimetría en primer lugar. La grasa es extraída mediante una pequeña liposucción, luego se limpia mediante centrifugación y finalmente se inyecta en las zonas a tratar. Los resultados, al igual que el tratamiento anterior, son visibles de inmediato. La diferencia mas notable es que en esta técnica los resultados permanecen visibles a largo plazo ya que la reabsorción del relleno solo se produce de manera parcial e inicial (alrededor del 10-20%). En algunos casos, puede ser necesario realizar algún pequeño retoque.
- Cirugía maxilofacial
Cuando las causas de la asimetría facial se deben a un problema óseo, es necesaria la cirugía maxilofacial. Dependiendo del caso particular de cada paciente, el cirujano puede optar por realizar una cirugía maxilofacial, que implica una intervención para reposicionar las bases óseas, una cirugía mandibular y/o una genioplastia (cirugía del mentón). Cualquiera de las cirugías, no presentan cicatrices visibles porque no se realizan incisiones externas. Se aplicará anestesia general y la duración de la operación, dependerá de cada paciente y del tipo de cirugía que se lleve a cabo. Son necesarios al menos dos días de hospitalización y un postoperatorio de entre 10 y 15 días debido a la inflamación de la zona tratada. Para una mejor recuperación, se deben tener en cuenta todas las recomendaciones del especialista y cumplir minuciosamente con todas las instrucciones.
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